Amparo lo tuvo claro. Era la
Virgen María quien le hablaba.
Todo sucedió cuando recibió un disparo de
la policía en plena refriega. Cuando despertó en el hospital decidió que su vida
debía cambiar radicalmente.
Su “enfangada” vida debía dar un giro de 180
y dejar de lado su servilismo político y su vida de pecado, y dedicarse a las
mujeres y a los niños buscando su auténtico bien.
Un abuelo
católico Ella había nacido en una familia muy normal de Ecuador. Su fe
era tradicional, de Misa dominical y poco más. La excepción de la regla fue su
abuelo, quien sí vivía una auténtica vida cristiana.
En cierta ocasión,
siendo Amparo adolescente y de camino hacia el ateísmo, su abuelo le dejó unas
palabras que no habría de olvidar nunca. Estaban entrando en una iglesia, y ante
una imagen de la Virgen le dijo: “Mírala a los ojos. Ella es la única
que te va a salvar y la que te va a llevar a la fe”. La cosa quedó ahí.
El resto fue una caída libre: expulsada del colegio por pelearse
con una monja, y un encuentro con evangélicos que acabaron de rematar
su camino rebelde y ateo.
La revolución y las
izquierdasEran los años 70 y 80, y la oferta social que Amparo
encontró fuera de la Iglesia era la de los movimientos revolucionarios,
la teología de la liberación marxista, el Che Guevara, los movimientos
feministas, abortistas, el indigenismo y ese largo etcétera. Se metió
de cabeza en todo ello.
|
Amparo en una manifestación
pro-aborto |
Si algo no se le puede reprochar a
Amparo es que no fuera una persona coherente con sus principios. Y tomó todas
las banderas, las abrazó y se dedicó a ellas. Lo mismo la encontrábamos en una
confrontación armada o en una manifestación antigubernamental, que en una
campaña a favor de los derechos reproductivos de las mujeres, es decir,
promoviendo los anticonceptivos y el aborto.
Se radicaliza en EspañaComo
la situación política en Ecuador se complicó, su padre la envió a España a
estudiar Pedagogía Social. En este país obtuvo su título universitario, pero
también su radicalización política y el contacto con otros movimientos
revolucionarios, ateos y anticlericales.
|
Su mentalidad feminista coincidía con la de la
ONU |
Ya de vuelta a Ecuador, su visión feminista
y de izquierdas casaba perfectamente bien con las políticas que lleva a cabo la
ONU en Latinoamérica, así que gracias a ello y a su formación llegó a
ser responsable en Ecuador del programa de la UNFPA, es decir del Fondo
de Población de las Naciones Unidas, desde donde contaba con todos los millones
de dólares que necesitase para cumplir, o mejor dicho, imponer los programas
contrarios a la natalidad, a favor del aborto y la anticoncepción.
Mi trabajo: quitar la fe a los
católicos Amparo ha explicado en la cadena católica de televisión
EWTN que “los grupos comunistas y socialistas saben que la única
institución que puede romper sus mentiras es la Iglesia Católica.
Entonces –confiesa- lo primero que buscas son argumentos que puedan destrozar la
poca fe que tienen los católicos. Ves las noticias o vas detrás de ese sacerdote
que no está viviendo su vida en gracia con Dios… Lo publicas y lo sacas en la
prensa… Y –concluye- si hay que callar que en Ecuador, el 60% de las obras de
ayuda a la gente pobre están en manos de la Iglesia, pues se
silencia”.
Dañar a la
Iglesia desde dentro
|
Mujeres indígenas en una charla de
adoctrinamiento |
El gran problema de los
sacerdotes es su soledad: “Nosotros íbamos buscando a los sacerdotes
abandonados en los pueblos y en las serranías para decirles que
si Dios existía, entonces por qué permitía la
pobreza.
‘La única manera es la revolución. Únase a
nosotros, y nosotros le ayudamos’. Había sacerdotes –lamenta ahora- que
cedían y que pensaban que tendrían un grupo que le ayudase, que le apoyase, que
estuviese con él… En ocasiones les ofrecíamos dinero a los sacerdotes y
a las religiosas para que pudieran reconstruir, mejorar sus centros
educativos con la única condición de que nos dejaran impartir clases de
educación sexual y reproductiva en sus colegios”.
Alejándose aún más de
Dios…En Amparo se cumple aquella cita de Chesterton que “cuando se
deja de creer en Dios enseguida se cree en cualquier cosa”.
Inmersa en
el ateísmo no dejaba de buscar algún resquicio de espiritualidad en la
lectura de cartas, reiki, yoga…: “Como la vida en la lucha de
izquierdas era una vida de pecado no te puedes librar de las consecuencias del
pecado. Es la muerte espiritual. Son como pequeños pactos con el demonio. Y el
demonio te los cobra -advierte. Así que empecé a sufrir por la parte del
dinero".
"Alguien me recomendó que me hiciera unas
limpias. Tenía mis propios mantras… que ahora que he podido traducirlos
dicen ‘yo pertenezco a Satanás’. Las mantras las hice en Estados Unidos
e, incluso, llevé a mis hijos al chamán que era un maestro ascendido de la
Religión Universal”.
…aunque Dios no está
lejosEn cierta ocasión estando en una comunidad, Amparo le retó a
Dios. Había una mujer rezando, pero ella empezó a increparla y llamarla loca. Al
grado de que acabó rompiéndole una estampita que tenía la pobre señora.
Su prepotencia de revolucionaria no le facilitaba muchas otras
soluciones en aquella ocasión. Poco después vino el siguiente paso hacia su
conversión.
Herida por
una bala de la policíaAmparo había participando en todo tipo de
|
Marcha indígena portando
lanzas |
manifestaciones y luchas contra el
gobierno. En ocasiones movilizando a los indígenas y facilitando que éstos
acudieran armados con lanzas. Pero cierto día estando en una de ellas fue herida
por una bala. Cuando recibió el impacto, Amparo recuerda dos cosas: por un lado
a su marido y sus hijos, y por otro lado una paz inexplicable, total. No tenía
miedo de irse. Todo era alegría, gozo, paz…
En eso, escuchó una voz que
le cantaba: “Vi unos ojos maravillosos. Vi el amor. Eran los ojos de la
Virgen. ¡Eran justamente los ojos de la estampa que yo había roto! La
estampa de la Virgen Milagrosa. La vi como una adolescente de 15 años. Con traje
blanco…”.
Mientras ella se desangraba, lo único que sentía era paz,
alegría… En ese momento la Virgen le dijo: “Mi pequeña, yo te
amo”. Y le pidió que dejara todas las causas que ella llevaba y que
tomara la causa de su Hijo. También se dio cuenta de que detrás de la Virgen
había un señor mayor: era su abuelo.
Y su marido la tomó por
loca Cuando se despertó le narró toda la experiencia a su marido,
Javier. Él la tomó por loca, y no era para menos. Una atea convencida, militante
anticatólica, y despertando de aquellos sueños…
En seguida le llevaron a
que maestros ascendidos, a psicólogos y expertos de la Nueva Era la examinaran y
la convencieran de que aquellas experiencias eran fruto de sus alucinaciones y
las heridas recibidas. Sin embargo, “nadie podía quitarme de la cabeza que era
Dios”.
Lo primero,
confesarse“Lo primero que necesitaba era un sacerdote. Necesitaba
confesarme. Lo primero, lo primero, era la confesión. Yo le pedía a Dios
que no me muriera por el camino, yendo a casa, porque me iría al
infierno. En la confesión estaban todos los pecados. Los más
horribles”.
Era una nueva etapa, y había que comenzar desde el principio
y bien hecho todo. Así que “lo primero que hice fue aprender a amar a Jesús, a
amar a los sacerdotes, a amar a la Iglesia, amar a los sacramentos”.
Amparo se sentía totalmente enfangada y a la vez invitada a una nueva
revolución: “Lo único que transforma el mundo es Dios. Yo no
soy digna. Es tan grande el amor de Dios…”
La conversión de su
maridoAmparó rezó e invitó a su marido Javier a la conversión. Con el
tiempo, Javier, igual de revolucionario que ella, empezó a dar pruebas de cambio
por amor a Amparo.
Debía ser una experiencia dramática en sí misma por
el solo hecho de tener que romper con toda una vida de convicciones y lucha
comprometida. Amparo lo explica así: “Mi marido aceptó creer en Dios y en la
Virgen, pero no creía en el sacramento. Pero Dios nos puso un sacerdote
santo en el camino. Por fin se confesó y su confesión duró más de dos
horas. Al salir, sintió que se había quitado quintales y quintales de
cosas”.
Ahora tocaba
denunciar las mentiras de la ONU
|
Denunciando la manipulación de la
ONU |
La conversión de las personas, las más de
las veces, es un proceso largo y con etapas. Amparo estaba en camino, pero aún
no renunciaba a toda su vida de pecado. Parte de ella la necesitaba, pues su
sueldo de Naciones Unidas era un ingreso necesario para la familia y su ritmo de
gastos.
Todo vino cuando una amiga suya le pidió información sobre la
distribución de la píldora del día siguiente por parte de Naciones Unidas en
Ecuador. Amparo era responsable de su importación y distribución en el
país.
De hecho su agencia de Naciones Unidas había vendido a
Ecuador 400.000 (cuatrocientas mil) dosis de la píldora del día siguiente.
La ONU en Nueva York, a la UNFPA en Ecuador: “Nos las venden a 25
centavos de dólar, y nosotros las vendemos entre 9 y 14 dólares. Es un
negocio redondo”.
En Ecuador hubo un juicio que perdió Naciones
Unidas por la distribución de la píldora y lo ganaron los provida, puesto que
tuvieron que reconocer que no es un método anticonceptivo, sino que es
antiimplantatorio, es decir abortivo, y que se utiliza cuando los métodos
anticonceptivos fallan.
El culmen de su decisión de convertirse y dar un
paso
|
Manifestación
provida |
definitivo hacia Dios se dio de
camino al juzgado en ese juicio que perdió la ONU: “Cuando estábamos llevando la
información al Tribunal, un periodista me hizo una pregunta que pensé
que era Dios quien me la hacía -estás con Dios o estás con el demonio-.
La pregunta fue: ¿Qué pensaba yo de la pastilla del día siguiente? Y, claro, yo
seguía trabajando para las Naciones Unidas y apoyaba a todas las organizaciones
proaborto. En ese momento me di cuenta de que era el momento de decir la verdad
y dejar de mentirme a mí misma. Era una incoherencia ser católica y a la vez,
por el dinero, seguir apoyando a una organización que va contra mis valores. Y,
claro, dije la verdad y las Naciones Unidas me
echaron”.
¿Qué
hay detrás de Naciones Unidas?Detrás de los proyectos de la ONU,
detrás de las palabras bonitas que usan cuando hablan de salud reproductiva, en
realidad hay toda una promoción del aborto y de los anticonceptivos. Es
el único objetivo para toda América Latina.
En la entrevista de
Amparo en la cadena de televisión norteamericana EWTN, denunciaba que en el
libro “Cuerpos, tambores y huellas”, editado por las propias Naciones Unidas, se
reconoce la promoción de las relaciones sexuales en niños desde los 10 años. Y
que en él se explica claramente tres cosas:
- que los padres no deben ser
informados de la educación sexual que reciben sus hijos,
- que los
colegios deben distribuir anticonceptivos a sus alumnos sin conocimiento
y consentimiento de los padres,
- y que si un maestro o médico
llegase a informar a los padres de que sus hijos están usando anticonceptivos,
ese maestro o médico debe ser expulsado de su trabajo por romper el silencio
profesional. Amparo, y no sólo de ella, denuncian la
existencia de un completo negocio en el que no se desaprovecha
nada: se promueve las relaciones sexuales entre los niños y
adolescentes, y se les venden preservativos. Como éstos fallan, entonces se les
ofrece el aborto o la píldora del día siguiente. Como el aborto produce restos
humanos, estos sirven bien para la experimentación o bien para extraer algunas
sustancias que después se usan cremas, champús, etc. Negocio
completo.
Puede ver una conferencia de Amparo Medina a
continuación:
Y ahora en la lucha por la
vidaLa realidad fue más dura de lo previsto en un primer momento.
El matrimonio lo perdió todo cuando salió de la revolución.
Tuvieron que renunciar a muchas cosas, las primeras a las materiales. Pero fue
“hermoso encontrar juntos el amor de Dios y quitarse los mitos con respecto a
los sacerdotes, a la Virgen, a la Iglesia…”
Amparo Medina y su marido
Javier Salazar son padres de tres hijos. Ella es Directora ejecutiva de Acción
Provida Ecuador (http://accionprovida.com.ec/) además de
colaborar y asesorar en otros organismos.
Ahora también lucha por la
familia, las mujeres y los niños, pero desde la verdad integral de las personas,
y no desde el negocio económico.
Amenazas de muerteUn nuevo
enfoque, sí, pero no exento de peligros. Así, Amparo ha sufrido amenazas
de muerte como la que recibió no hace mucho en una caja de zapatos
dentro de la cual había una rata muerta con el mensaje “muerte a los
provida” y “recuerde que los accidentes existen, recuerde que las
muertes accidentales son el día a día de este país, NO SIGA CON SU CAMPAÑA ANTI
MUJER Y HOMOFÓBICA…Muerte a los traidores, muerte a los anti Patria, MUERTE O
REVOLUCIÓN”.
Amparo no se arredra. Y sigue con su lucha confiada en que
tiene en sus manos la posibilidad de defender miles de vidas humanas.
Si
desea ver una entrevista realizada a Amparo Medina en la cadena de televisión
nortemericana EWTN puede seguirla aquí:
|