El video nos muestra imágenes de la realización de un aborto. El propio doctor americano Nathanson que fue el principal abortista en Estados Unidos en pasadas décadas, actualmente convertido a la causa: Pro Vida, nos comenta la realidad vergonzosa del aborto y su falacia. Las imágenes son principalmente ecográficas, de tal manera que cuando la punta succionadora de la sonda se acerca a su cuerpecito, el bebé abre la boca y emite el “grito silencioso”, mientras se revuelve agitadamente en el seno materno y su corazón pasa de 140 por minuto a 200. El doctor nos narra los descubrimientos modernos que la Ciencia de la Fetología ha realizado últimamente y que demuestra como el niño siente el dolor que le produce la sonda aspiradora mientras le asesina, ya que su sistema nervioso es capaz ya de transmitirle las sensaciones dolorosas. La última parte del video nos muestra un análisis comparativo de las cifras de aborto realizadas en Estados Unidos y mundiales, cifras equivalentes a las muertes acaecidas en las guerras mundiales.
Wednesday, December 28, 2011
Thursday, December 22, 2011
Feliz Navidad
Documentación
•Benedicto XVI: Navidad, misterio que conmueve nuestra fe y existencia
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Santa Sede
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Benedicto XVI: Dios toma nuestra carne para vencer a la muerte
Catequesis del papa en preparación al nacimiento de Jesús, hoy
CIUDAD DEL VATICANO, miércoles 21 diciembre 2011 (ZENIT.org).- En la Audiencia General de esta mañana, desarrollada en el Aula Paulo VI, el santo padre Benedicto XVI se ha encontrado con grupos de peregrinos y fieles venidos de Italia y de varias partes del mundo. El papa ha centrado su discurso en lengua italiana, en el misterio de la Navidad que ya está cerca. Después de haber resumido su catequesis en diversas lenguas, el Santo Padre ha dirigido particulares expresiones de saludo a los grupos de fieles presentes.
La Audiencia General ha concluido con el canto del Pater Noster y la Bendición Apostólica impartida junto a los obispos presentes.
El papa se ha hecho eco del saludo que está estos días en boca de todos: “¡Feliz Navidad! “Verifiquemos que, también en la sociedad actual, el intercambio de los saludos no pierda su profundo valor religioso, y la fiesta no sea absorbida por los aspectos exteriores, que tocan las fibras del corazón”, advirtió Benedicto XVI. Los signos externos, insistió, “son hermosos e importantes, siempre que no nos distraigan, sino que nos ayuden a vivir la Navidad en su verdadero sentido”.
Con la liturgia navideña la Iglesia nos introduce en el gran Misterio de la Encarnación. La Navidad, dijo, “no es un simple aniversario del nacimiento de Jesús; es también esto, pero es más aún, es celebrar un Misterio que ha marcado y continua marcando la historia del hombre”.
E hizo preguntas que cualquiera se hace: ¿cómo es posible que yo viva ahora este evento tan lejano en el tiempo? ¿Cómo puedo participar provechosamente en el nacimiento del Hijo de Dios, ocurrido hace más de dos mil años?
En la Santa Misa de la Noche de Navidad, se repite la respuesta al salmo responsorial: “Hoy ha nacido para nosotros el Salvador”.
Este adverbio de tiempo, subrayó el papa, “hoy”, se utiliza más veces en las celebraciones natalicias y está referido al hecho del nacimiento de Jesús y a la salvación que la Encarnación del Hijo de Dios viene a traer.
“En la Liturgia, tal venida sobrepasa los límites del espacio y del tiempo y se vuelve actual, presente; su efecto perdura, en el transcurrir de los días, de los años y de los siglos. Indicando que Jesús nace 'hoy', la Liturgia no usa una frase sin sentido, sino subraya que esta Navidad incide e impregna toda la historia, sigue siendo una realidad incluso hoy, a la cual podemos acudir precisamente en la liturgia”.
“El Eterno ha entrado en los límites del tiempo y del espacio, para hacer posible 'hoy' el encuentro con Él. Los textos litúrgicos navideños nos ayudan a entender que los eventos de la salvación realizados por Cristo son siempre actuales, interesan a cada hombre y a todos los hombres. Cuando escuchamos o pronunciamos, en las celebraciones litúrgicas, este 'hoy ha nacido para nosotros el Salvador', no estamos utilizando una expresión convencional vacía, sino entendemos que Dios nos ofrece 'hoy, ahora, a mí, a cada uno de nosotros, la posibilidad de reconocerlo y de acogerlo, como hicieron los pastores de Belén, para que Él nazca también en nuestra vida y la renueve, la ilumine, la transforme con su Gracia, con su Presencia”.
Aludió el papa a un segundo aspecto: el evento de Belén debe ser considerado a la luz del Misterio Pascual: el uno y el otro son parte de la única obra redentora de Cristo. “La Encarnación y el nacimiento de Jesús nos invitan a dirigir, desde ya, la mirada sobre su muerte y su resurrección: Navidad y Pascua, ambas son fiestas de la redención”.
cuando la luz y el calor del sol no llegan a despertar a la naturaleza, envuelta por el frío; pero sin embargo, bajo su manto palpita la vida y comienza de nuevo la victoria del sol y del calor.
“En Navidad encontramos la ternura y el amor de Dios que se inclina sobre nuestros límites, sobre nuestras debilidades, sobre nuestros pecados y se abaja hasta nosotros”. “Miremos a la gruta de Belén: Dios se abaja hasta ser acostado en un pesebre, que es ya el preludio del abajamiento en la hora de su pasión. El culmen de la historia del amor entre Dios y el hombre pasa a través del pesebre de Belén y el sepulcro de Jerusalén”.
“Les deseo a todos ustedes y a sus familias, la celebración de una Navidad verdaderamente cristiana, de modo que también los intercambios de saludos en aquel día sean expresión del gozo de saber que Dios está cerca de nosotros y quiere recorrer con nosotros el camino de la vida”.
Leer la catequesis completa en: http://www.zenit.org/article-41170?l=spanish.
Al final de la catequesis, el papa se dirigió a los peregrinos de lengua castellana con estas palabras: “En la sociedad actual, donde por desgracia las fiestas que se avecinan están perdiendo progresivamente su valor religioso, es importante que los signos externos de estos días no nos alejen del significado genuino del misterio que celebramos. A saber: el Verbo de Dios se ha hecho carne y ha puesto su morada entre nosotros. Vivamos, por tanto, con gozo este hecho maravilloso. El Eterno ha entrado en los límites del espacio y el tiempo para hacer posible que hoy nos encontremos con Él. Dios está cerca de cada uno de nosotros y desea que lo descubramos, para que con su luz se disipen las tinieblas que encubren nuestra vida y la humanidad. Vivamos asimismo la Navidad contemplando con fervor el camino del inmenso amor de Dios, que nos atrae hacia Sí a través de la encarnación, pasión, muerte y resurrección de su Hijo. Sobre todo, vivamos este misterio en la Eucaristía, verdadero eje de la Navidad. En ella se hace realmente presente Jesús, Pan bajado del cielo y Cordero sacrificado por nuestra salvación”.
Benedicto XVI saludó “en particular a los grupos venidos de España y de los países latinoamericanos” e invitó “a todos a celebrar una Navidad auténticamente cristiana, con la alegría de saber que el Señor vino al mundo para salvarnos. Él quiere recorrer a nuestro lado el camino de la vida. Al Niño Dios pediré por todos, especialmente por quienes pasan por duras pruebas. Que en estos días santos, la caridad cristiana se muestre singularmente activa con los más necesitados. Para los pobres no puede haber dilación. Feliz Navidad”.
Monday, December 5, 2011
Con vuestro patrimonio de sabiduría y de fe, una experiencia de universalidad
El papa al III Congreso Mundial de Pastoral para los estudiantes internacionales
CIUDAD DEL VATICANO, viernes 2 de diciembre de 2011 (ZENIT.org).- Este viernes, en la Sala del Consistorio del Palacio Apostólico Vaticano, Benedicto XVI recibió en audiencia a los participantes en el III Congreso Mundial de Pastoral para los estudiantes internacionales, promovido por el Consejo Pontificio de la Pastoral para los Emigrantes y los Itinerantes, sobre el tema: Estudiantes internacionales y encuentro de las culturas (Roma, 30 de noviembre-3 de diciembre). Ofrecemos a continuación el discurso que el papa dirigió a los presentes en la Audiencia.
* * * * *
Señores cardenales,
venerados hermanos en el episcopado y en el sacerdocio,
queridos estudiantes,
¡Queridos hermanos y hermanas!
Estoy muy contento de acogeros con ocasión del III Congreso Mundial de Pastoral para los estudiantes internacionales, organizado por el Consejo Pontificio de la Pastoral para los Emigrantes y los Itinerantes. Saludo y agradezco al presidente, monseñor Antonio Maria Vegliò, por las corteses palabras con las que ha presentado este encuentro. Saludo también a los superiores y a los oficiales del dicasterio y a cada uno de vosotros, que habéis venido aquí desde todas las partes del mundo, sobre todo de los países con mayor afluencia de estudiantes internacionales. Deseo expresar mi aprecio por el compromiso asumido en favor de que las jóvenes generaciones sean orientadas y apoyadas para perfeccionar su formación, afrontando los desafíos del mundo gobalizado y secularizado. Dirijo un particular saludo a los estudiantes universitarios aquí presentes, con la esperanza de que, después de ser destinatarios de esta especial atención pastoral, se conviertan en protagonistas de la misión de la Iglesia.
Destaco con gran interés el tema que habéis elegido para el Congreso: Estudiantes internacionales y encuentro de las culturas. El encuentro de las culturas es una realidad fundamental en nuestra época y para el futuro de la humanidad y de la Iglesia. El hombre y la mujer no pueden alcanzar un nivel de vida verdadera y plenamente humano si no es mediante la cultura (Conc. Ecum. Vat. II, Const. Gaudium et Spes, 53); y la Iglesia está atenta a que la centralidad de la persona humana sea artífice de la actividad cultural que es su último destinatario.
Hoy, más que nunca, la apertura recíproca entre las culturas es el terreno privilegiado para el diálogo entre los que están comprometidos en la búsqueda de un humanismo auténtico. El encuentro de las culturas en el ámbito universitario debe ser, por tanto, animado y apoyado, teniendo como base los principios humanos y cristianos, los valores universales, para que ayude a hacer crecer a una nueva generación capaz de diálogo y discernimiento, comprometida a difundir el respeto y la colaboración por la paz y el desarrollo. Los estudiantes internacionales, de hecho, tienen la potencialidad de convertirse, con su formación intelectual, cultural y espiritual, en artífices y protagonistas de un mundo con un rostro más humano. Espero vivamente que haya buenos programas a nivel continental y mundial para ofrecer a muchos jóvenes esta oportunidad.
A causa de la carencia de formación cualificada y de estructuras adecuadas en la propia tierra, como también debido a las tensiones sociales y políticas y, gracias a los apoyos económicos para el estudio en el extranjero, los estudiantes internacionales son una realidad en aumento en el gran fenómeno migratorio. Es importante, por tanto, ofrecerles una sana y equilibrada preparación intelectual, cultural y espiritual, para que no sean presa de la “fuga de cerebros”, sino que formen una categoría social y culturalmente importante desde la perspectiva de su vuelta a casa como futuros responsables en los países de origen, y contribuyan a construir “puentes”, culturales, sociales y espirituales con los países de acogida. Las universidades y las instituciones católicas de educación superior están llamadas a ser “laboratorios de humanidad”, ofreciendo programas y cursos que estimulen a los jóvenes estudiantes en la búsqueda no solo de una cualificación profesional, sino también de la respuesta a la petición de felicidad, de sentido y de plenitud, que habita en el corazón del hombre.
El mundo universitario es para la Iglesia un campo privilegiado para la evangelización. Como destaqué en el Mensaje para la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado del próximo año, los ateneos de inspiración cristiana, cuando se mantienen fieles a su propia identidad, se convierten en lugares de testimonio, donde Jesús puede ser encontrado y conocido, donde se puede experimentar su presencia, que reconcilia, serena e infunde una nueva esperanza. La difusión de ideologías “débiles” en los diversos campos de la sociedad impele a los cristianos a un nuevo empuje en el ámbito intelectual, con el fin de animar a las nuevas generaciones a la búsqueda y el descubrimiento de la verdad sobre el hombre y sobre Dios. La vida del beato John Henry Newman, tan ligada al contexto académico, confirma la importancia y la belleza de promover un ambiente educativo en el que la formación intelectual, la dimensión ética y el compromiso religioso proceden unidos. La pastoral universitaria, por tanto, se ofrece a los jóvenes como apoyo para que la comunión con Cristo les conduzca a percibir el misterio más profundo del hombre y de la historia. El encuentro con los universitarios ayuda a descubrir y a valorar el tesoro escondido en cada estudiante internacional, considerando su presencia como un factor de enriquecimiento humano, cultural y espiritual. Los jóvenes cristianos, proviniendo de culturas distintas, pero perteneciendo a la única Iglesia de Cristo, pueden demostrar que el Evangelio es Palabra de esperanza y de salvación para los hombres de todos los pueblos y culturas, de todas las edades y de todas las épocas, como quise afirmar también en mi reciente Exhortación apostólica postsinodal Africae Munus (nn.134.138).
Queridos jóvenes estudiantes, os animo a aprovechar el tiempo de vuestros estudios para crecer en el conocimiento y en el amor de Cristo, mientras recorréis vuestro itinerario de formación intelectual y cultural. Conservando vuestro patrimonio de sabiduría y de fe, en la experiencia de vuestra formación cultural en el extranjero, podréis tener una valiosa oportunidad de universalidad, de hermandad y también de comunicación del Evangelio. Os auguro todo bien en los trabajos de vuestro Congreso y os aseguro mi oración. Encomiendo a María, Madre de Jesús, el compromiso y los generosos propósitos de todos los que cuidan a los emigrantes, en particular a los estudiantes internacionales, y de corazón os imparto a todos la Bendición Apostólica.
[Traducción del original italiano por Carmen Álvarez
©Libreria Editrice Vaticana]
CIUDAD DEL VATICANO, viernes 2 de diciembre de 2011 (ZENIT.org).- Este viernes, en la Sala del Consistorio del Palacio Apostólico Vaticano, Benedicto XVI recibió en audiencia a los participantes en el III Congreso Mundial de Pastoral para los estudiantes internacionales, promovido por el Consejo Pontificio de la Pastoral para los Emigrantes y los Itinerantes, sobre el tema: Estudiantes internacionales y encuentro de las culturas (Roma, 30 de noviembre-3 de diciembre). Ofrecemos a continuación el discurso que el papa dirigió a los presentes en la Audiencia.
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Señores cardenales,
venerados hermanos en el episcopado y en el sacerdocio,
queridos estudiantes,
¡Queridos hermanos y hermanas!
Estoy muy contento de acogeros con ocasión del III Congreso Mundial de Pastoral para los estudiantes internacionales, organizado por el Consejo Pontificio de la Pastoral para los Emigrantes y los Itinerantes. Saludo y agradezco al presidente, monseñor Antonio Maria Vegliò, por las corteses palabras con las que ha presentado este encuentro. Saludo también a los superiores y a los oficiales del dicasterio y a cada uno de vosotros, que habéis venido aquí desde todas las partes del mundo, sobre todo de los países con mayor afluencia de estudiantes internacionales. Deseo expresar mi aprecio por el compromiso asumido en favor de que las jóvenes generaciones sean orientadas y apoyadas para perfeccionar su formación, afrontando los desafíos del mundo gobalizado y secularizado. Dirijo un particular saludo a los estudiantes universitarios aquí presentes, con la esperanza de que, después de ser destinatarios de esta especial atención pastoral, se conviertan en protagonistas de la misión de la Iglesia.
Destaco con gran interés el tema que habéis elegido para el Congreso: Estudiantes internacionales y encuentro de las culturas. El encuentro de las culturas es una realidad fundamental en nuestra época y para el futuro de la humanidad y de la Iglesia. El hombre y la mujer no pueden alcanzar un nivel de vida verdadera y plenamente humano si no es mediante la cultura (Conc. Ecum. Vat. II, Const. Gaudium et Spes, 53); y la Iglesia está atenta a que la centralidad de la persona humana sea artífice de la actividad cultural que es su último destinatario.
Hoy, más que nunca, la apertura recíproca entre las culturas es el terreno privilegiado para el diálogo entre los que están comprometidos en la búsqueda de un humanismo auténtico. El encuentro de las culturas en el ámbito universitario debe ser, por tanto, animado y apoyado, teniendo como base los principios humanos y cristianos, los valores universales, para que ayude a hacer crecer a una nueva generación capaz de diálogo y discernimiento, comprometida a difundir el respeto y la colaboración por la paz y el desarrollo. Los estudiantes internacionales, de hecho, tienen la potencialidad de convertirse, con su formación intelectual, cultural y espiritual, en artífices y protagonistas de un mundo con un rostro más humano. Espero vivamente que haya buenos programas a nivel continental y mundial para ofrecer a muchos jóvenes esta oportunidad.
A causa de la carencia de formación cualificada y de estructuras adecuadas en la propia tierra, como también debido a las tensiones sociales y políticas y, gracias a los apoyos económicos para el estudio en el extranjero, los estudiantes internacionales son una realidad en aumento en el gran fenómeno migratorio. Es importante, por tanto, ofrecerles una sana y equilibrada preparación intelectual, cultural y espiritual, para que no sean presa de la “fuga de cerebros”, sino que formen una categoría social y culturalmente importante desde la perspectiva de su vuelta a casa como futuros responsables en los países de origen, y contribuyan a construir “puentes”, culturales, sociales y espirituales con los países de acogida. Las universidades y las instituciones católicas de educación superior están llamadas a ser “laboratorios de humanidad”, ofreciendo programas y cursos que estimulen a los jóvenes estudiantes en la búsqueda no solo de una cualificación profesional, sino también de la respuesta a la petición de felicidad, de sentido y de plenitud, que habita en el corazón del hombre.
El mundo universitario es para la Iglesia un campo privilegiado para la evangelización. Como destaqué en el Mensaje para la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado del próximo año, los ateneos de inspiración cristiana, cuando se mantienen fieles a su propia identidad, se convierten en lugares de testimonio, donde Jesús puede ser encontrado y conocido, donde se puede experimentar su presencia, que reconcilia, serena e infunde una nueva esperanza. La difusión de ideologías “débiles” en los diversos campos de la sociedad impele a los cristianos a un nuevo empuje en el ámbito intelectual, con el fin de animar a las nuevas generaciones a la búsqueda y el descubrimiento de la verdad sobre el hombre y sobre Dios. La vida del beato John Henry Newman, tan ligada al contexto académico, confirma la importancia y la belleza de promover un ambiente educativo en el que la formación intelectual, la dimensión ética y el compromiso religioso proceden unidos. La pastoral universitaria, por tanto, se ofrece a los jóvenes como apoyo para que la comunión con Cristo les conduzca a percibir el misterio más profundo del hombre y de la historia. El encuentro con los universitarios ayuda a descubrir y a valorar el tesoro escondido en cada estudiante internacional, considerando su presencia como un factor de enriquecimiento humano, cultural y espiritual. Los jóvenes cristianos, proviniendo de culturas distintas, pero perteneciendo a la única Iglesia de Cristo, pueden demostrar que el Evangelio es Palabra de esperanza y de salvación para los hombres de todos los pueblos y culturas, de todas las edades y de todas las épocas, como quise afirmar también en mi reciente Exhortación apostólica postsinodal Africae Munus (nn.134.138).
Queridos jóvenes estudiantes, os animo a aprovechar el tiempo de vuestros estudios para crecer en el conocimiento y en el amor de Cristo, mientras recorréis vuestro itinerario de formación intelectual y cultural. Conservando vuestro patrimonio de sabiduría y de fe, en la experiencia de vuestra formación cultural en el extranjero, podréis tener una valiosa oportunidad de universalidad, de hermandad y también de comunicación del Evangelio. Os auguro todo bien en los trabajos de vuestro Congreso y os aseguro mi oración. Encomiendo a María, Madre de Jesús, el compromiso y los generosos propósitos de todos los que cuidan a los emigrantes, en particular a los estudiantes internacionales, y de corazón os imparto a todos la Bendición Apostólica.
[Traducción del original italiano por Carmen Álvarez
©Libreria Editrice Vaticana]
Saturday, December 3, 2011
Sin brazos y abandonada por su novio al quedarse embarazada, decidió tener a su hijo
Una historia de superación y tenacidad. Además es pintora de reconocido prestigio que pinta con la boca. Actualizado 3 diciembre 2011 Caminocatolico.org Alison Lapper, una mujer con un cuerpo pequeño y deforme que nació sin brazos, artista que pinta con la boca y trabaja con la fotografía artística y digital, fue abandonada por su novio cuando quedó embarazada en 1998. Alison decidió seguir adelante a pesar de las dudas y el temor de que el bebé heredara su deficiencia. Parys, su hijo, nació en 1999 perfectamente sano, ella le dio el pecho un buen tiempo y continuó con su trabajo como pintora y artista gráfica, como cualquier madre independiente. Ahora su hijo tiene 12 años. Al principio le preocupaba lo que pasaría con su hijo y se decía "algún día Parys se avergonzará de mí", más eso no ha pasado. Alison ha incluido a su hijo en varias de sus obras fotográficas. Alison cuenta su testimonio de superación y en favor de la vida en el vídeo que publicamos más abajo, un reportaje emitido en RTVE, en el programa “Documentos TV”. Sin brazos y con piernas cortas Alison Lapper nació el 7 de abril de 1965 en Burton, Staffordshire, Inglaterra. Hasta el momento del parto sus padres y los médicos no detectaron ningún problema. Sin embargo, Alison nació perfectamente pero con una particularidad que le marcaría de por vida, no tendría brazos y sus piernas serían más cortas de lo normal. Fue abandonada por sus padres En su infancia, Alison fue abandonada por sus padres. Tenía cuatro meses cuando su madre aceptó verla por primera y última vez. A su padre no le conoce. Eran obreros de una fábrica automovilística en el condado de Yokshire y se separaron cuando ella nació. También tiene una hermana, sin minusvalías, tres años más mayor a la que apenas conoce. Por lo tanto, Alison pasó toda su infancia en un colegio de disminuidos rodeada de otros niños que se parecían a ella físicamente. “Éramos varios niños sin miembros, a consecuencia de la ola de la talidomida. Para nosotros era difícil adquirir el equilibrio. No podíamos estar sentados sin caernos y éramos incapaces de levantarnos. Entonces, nos cogían y nos colocaban sobre un zócalo de escayola. Éramos niños de exposición“, recuerda Alison sonriendo. Sin querer prolongaciones Desde que tenía tres meses han intentado implantarle brazos y piernas artificiales. Pero ella misma afirma que aquello era pesado y poco confortable. “Con esos aparatos me sentía más torpe todavía. Desde que supe hablar pedí que me los quitaran. La gente abusa de su poder sobre los niños. De hecho, esas prolongaciones no me las ponían tanto por mi bien cuanto por el suyo“. Cuando cumplió 12 años comprendió realmente que era minusválida. “Hasta entonces estuve demasiado ocupada siendo niña“. Pero en este momento abandonó la niñez para adentrarse en la pubertad y comenzó a comprender su diferencia. Con violencia fue arrojada fuera de la infancia para convertirse en una mujer; las líneas de su cuerpo comenzaban a diseñarse y ella deseaba ser bella y seductora. Sin embargo, supo salir adelante. Quería ser pintora Ella no se resignó y, con 19 años, viajó sola a Londres para diplomarse en Bellas Artes y convertirse entonces en una reconocida pintora. Comenzó a pintar a los tres años. “Pinto con la boca a golpe de pequeños movimientos secos de cabeza, como hacen esos perros colocados en el salpicadero del coche“, explica. Su pintura ha obtenido el reconocimiento y ha sido premiada con la mayor condecoración de Inglaterra, el Member of the British Empire (MBE) por los servicios prestados al arte. Se la entregó la reina en persona. “No sé cuáles son exactamente esos servicios. Tampoco sé quién me propuso para este título. El voto es anónimo. Quiero creer que sólo se ha juzgado mi trabajo artístico y no mi deformidad”. A lo largo de su vida ha tenido que soportar exclusiones y miradas de rechazo por ser diferente, pero ha sabido ver el lado positivo y salir adelante. Embarazada y abandonada por su novio A los 33 años Alison quedó embarazada pero al igual que con sus padres, también fue abandonada por su novio, pero ella decidió seguir adelante a pesar de las dudas y el temor de que el bebé heredara su deficiencia. El artista inglés Marc Quinn le realizó una escultura en su honor titulada "Alison Lapper Embarazada". La estatua estuvo lista para ser presentada en el 2005, entró a concurso para poder ocupar el llamado "Cuarto pedestal" de la histórica Plaza de Trafalgar, la estatua de mármol blanco mide 3.6 metros de altura y pesa 11.5 toneladas, estuvo ahí desde septiembre de 2005 hasta el 2007, cuando fue remplazada por otra mediante otro concurso.
Thursday, December 1, 2011
El Parlamento Europeo podría aprobar el aborto como medio de lucha contra el sida
Luis Antequera/ReL
Hoy jueves 1 de diciembre, el Parlamento Europeo se dispone a votar una resolución sobre la respuesta que ha de dar la Unión Europea para hacer frente al VIH/sida en la UE y en los países vecinos.
En ella el Parlamento europeo propone dos peticiones, la primera dirigida a los estados miembro, y la segunda a las instituciones de la Unión. En ambas insta a utilizar el aborto, llamado por su nombre en una única ocasión, y disfrazado bajo la alocución “salud sexual y reproductiva” idéntica a la que da nombre a la ley española que convirtió el del aborto en un derecho a la mujer, en otras dos, como instrumento para la lucha contra el sida.
En la que hace la número 14 se “pide a todos los Estados miembros que velen por que todos los programas y estrategias nacionales de lucha contra el sida establezcan vínculos firmes entre la salud sexual y reproductiva y los servicios relacionados con el VIH, como se aconsejaba en el informe Cochrane (Cochrane Review) y se reafirmó en la 42ª sesión de la Comisión de Población y Desarrollo de las Naciones Unidas, que supervisa la puesta en práctica del programa de acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD).
En la que hace la número 22, se “pide a la Comisión y al Consejo que aseguren el acceso a servicios, informaciones y suministros en materia de salud sexual y reproductiva amplios y de calidad; considera que estos deberían cubrir, entre otras cosas, asesoramiento confidencial y voluntario y pruebas de detección y tratamientos para el VIH y todas las enfermedades de transmisión sexual; prevención de embarazos no deseados; acceso igual y asequible a los anticonceptivos, incluida la contracepción de emergencia; aborto seguro y legal, incluidos los cuidados post-aborto; cuidado y tratamiento para prevenir la transmisión vertical del VIH, incluidas las parejas y los niños”.
Hoy jueves 1 de diciembre, el Parlamento Europeo se dispone a votar una resolución sobre la respuesta que ha de dar la Unión Europea para hacer frente al VIH/sida en la UE y en los países vecinos.
En ella el Parlamento europeo propone dos peticiones, la primera dirigida a los estados miembro, y la segunda a las instituciones de la Unión. En ambas insta a utilizar el aborto, llamado por su nombre en una única ocasión, y disfrazado bajo la alocución “salud sexual y reproductiva” idéntica a la que da nombre a la ley española que convirtió el del aborto en un derecho a la mujer, en otras dos, como instrumento para la lucha contra el sida.
En la que hace la número 14 se “pide a todos los Estados miembros que velen por que todos los programas y estrategias nacionales de lucha contra el sida establezcan vínculos firmes entre la salud sexual y reproductiva y los servicios relacionados con el VIH, como se aconsejaba en el informe Cochrane (Cochrane Review) y se reafirmó en la 42ª sesión de la Comisión de Población y Desarrollo de las Naciones Unidas, que supervisa la puesta en práctica del programa de acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD).
En la que hace la número 22, se “pide a la Comisión y al Consejo que aseguren el acceso a servicios, informaciones y suministros en materia de salud sexual y reproductiva amplios y de calidad; considera que estos deberían cubrir, entre otras cosas, asesoramiento confidencial y voluntario y pruebas de detección y tratamientos para el VIH y todas las enfermedades de transmisión sexual; prevención de embarazos no deseados; acceso igual y asequible a los anticonceptivos, incluida la contracepción de emergencia; aborto seguro y legal, incluidos los cuidados post-aborto; cuidado y tratamiento para prevenir la transmisión vertical del VIH, incluidas las parejas y los niños”.
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